En la actualidad la
preparación de buñuelos se ha convertido en un negocio. Nicolás León es un
yungaino que prepara buñuelos hace 64 años.
Las familias yungainas
preparan buñuelos a base de harina de pan, levadura y huevos, acompañados con
miel de cedrón con azúcar para recibir la Navidad.
Por: Yanet Reyes
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Sin embargo, con el
correr de los años esta costumbre, bastante acentuada en los yungainos antiguos,
se ha ido perdiendo al interior de los hogares pero se ha convertido en un
negocio que tiene mucha demanda los domingos en el mercado.
La
dulce costumbre de antaño
Nicolás León Giraldo es
un experto preparando buñuelos, no en vano se ha dedicado a esta labor
navideña, por así decirlo, desde que tenía 12 años. Refiere que comprar los
ingredientes, prepararlos y consumir los buñuelos era todo un ritual de
Navidad, que él aún realiza.
Para elaborar este rico
manjar solo se necesita mezclar harina de pan con levadura y huevos bien
batidos hasta lograr una masa flexible que se fríe en una cacerola con
abundante aceite como si fueran pequeñas cachangas hasta que tomen un color
amarillo y queden crocantes.
Pero eso no es todo, se
acompaña con miel elaborada de hojas de cedrón con azúcar, detalla León, quien
agrega que este exquisito postre se consumía masivamente en las casas los días
23, 24 y 25 de diciembre.
“Ahora también lo
venden a tres por un sol los domingos en el mercado y también el día de la
Navidad, es que se ha convertido en un negocio, pues antes solo se preparaban
en las casas”, refiere con cierta nostalgia.
Niño
recién nacido o Niño Mellque en quechua
Asimismo, nos cuenta
que hay una tradición que aún se conserva en Yungay y es la procesión del Niño
Mellque en quechua, que significa cargar al niño recién nacido.
La pequeña imagen del
Niño Dios es sacada de la capilla de la localidad de Piquip el 24 de diciembre
a las cuatro de la tarde por los devotos, quienes en brazos lo trasladan hasta
el nacimiento del templo Santo Domingo de Guzmán, ubicado frente a la Plaza de
Armas de Yungay.
Lo curioso de esta
procesión es que antes de cargar al niño, cada feligrés debe dejar su donación,
la cual es usada para cubrir los gastos de la misa que se realiza unos días
después de la Navidad.
Testigos
del nacimiento del Niño Dios
En vísperas de la
Navidad, los pastorcillos y los ángeles, acompañados de un coro de niños,
adoran al Niño Dios que acaba de nacer con armoniosos cánticos como si fueran
los verdaderos testigos de aquel acontecimiento que le devolvió la esperanza al
mundo entero.
Por:
Yanet Reyes
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